Equipo inicial en Tenerife |
Llega el final de 2012, un año que va a quedar grabado en la mente y en la retina de los aficionados de la Balona y de los linenses en general por lo mucho que supuso para el club y para la ciudad.
El equipo estrenó el año con una victoria por 0-3 en Roquetas en el partido que cerraba la primera vuelta con dos goles de David Hernández y uno de Juanpe. A la semana siguiente, nuevo desplazamiento, en este caso para iniciar la segunda vuelta, y nueva goleada a domicilio. El Almería B cayó por el mismo resultado que en el partido de la primera jornada, 2-4.Dos goles de Ocaña y uno de Juanpe y David Hernández sentenciaron las aspiraciones del equipo.
No obstante, el Melilla devolvió un poco a la realidad a los linenses con una derrota en casa con la ley del mínimo esfuerzo pero que fue rápidamente resarcida en Badajoz con una victoria por 1-2 con goles de Ocaña y Ximo Forner que permitió recuperar el segundo puesto.
La Balona ‘sufrió’ luego dos empates consecutivos que le hicieron hacer temer por el viceliderato. Un gol del sevillista Atienza en propia meta salvó al equipo linense de perder los tres puntos en casa. Una semana después fue Ocaña el que logró el tanto que propició el empate en el Ramón de Carranza. Pero la ‘tragedia’ se produjo siete días más tarde con el extraño partido ante el Villanovense, que acabó con un inesperado 3-5. Los extremeños se pusieron por delante con un rotundo 0-3 al que la Balona respondió con dos goles de Copi, pero el 2-4 fue un mazazo del que, no obstante, se pudo recuperar con otro tanto del algecireño. Lo malo fue que el Villanovense no se detuvo en su afán de victoria y logró el quinto.
Aquello fue un palo clasificatorio. Tres partidos sin ganar con la igualdad que había en cabeza fueron demasiados partidos. Pero el domingo de Carnaval se dio el golpe sobre la mesa y una victoria por 0-3 en Lorca (goles de Ocaña, Copi y Ortiz) y otro a la jornada siguiente ante el San Roque de Lepe (gol de Copi de penalti) permitieron recuperar el terreno perdido.
El equipo estrenó el año con una victoria por 0-3 en Roquetas en el partido que cerraba la primera vuelta con dos goles de David Hernández y uno de Juanpe. A la semana siguiente, nuevo desplazamiento, en este caso para iniciar la segunda vuelta, y nueva goleada a domicilio. El Almería B cayó por el mismo resultado que en el partido de la primera jornada, 2-4.Dos goles de Ocaña y uno de Juanpe y David Hernández sentenciaron las aspiraciones del equipo.
No obstante, el Melilla devolvió un poco a la realidad a los linenses con una derrota en casa con la ley del mínimo esfuerzo pero que fue rápidamente resarcida en Badajoz con una victoria por 1-2 con goles de Ocaña y Ximo Forner que permitió recuperar el segundo puesto.
La Balona ‘sufrió’ luego dos empates consecutivos que le hicieron hacer temer por el viceliderato. Un gol del sevillista Atienza en propia meta salvó al equipo linense de perder los tres puntos en casa. Una semana después fue Ocaña el que logró el tanto que propició el empate en el Ramón de Carranza. Pero la ‘tragedia’ se produjo siete días más tarde con el extraño partido ante el Villanovense, que acabó con un inesperado 3-5. Los extremeños se pusieron por delante con un rotundo 0-3 al que la Balona respondió con dos goles de Copi, pero el 2-4 fue un mazazo del que, no obstante, se pudo recuperar con otro tanto del algecireño. Lo malo fue que el Villanovense no se detuvo en su afán de victoria y logró el quinto.
Aquello fue un palo clasificatorio. Tres partidos sin ganar con la igualdad que había en cabeza fueron demasiados partidos. Pero el domingo de Carnaval se dio el golpe sobre la mesa y una victoria por 0-3 en Lorca (goles de Ocaña, Copi y Ortiz) y otro a la jornada siguiente ante el San Roque de Lepe (gol de Copi de penalti) permitieron recuperar el terreno perdido.
Eduardo Herrera entregó la Medalla de la Federación Andaluza |
En los dos desplazamientos siguientes, a Puertollano y Jaén, se lograron sendos empates valiosos por las claras aspiraciones del rival. Por medio, además, dos victorias sin jugar ante Sporting Villanueva y Poli Ejido y otra con gol de Juanpe sobre el Ceuta. Todo eso supuso once puntos sobre quince posibles y quedó casi cerrada la clasificación para la fase de ascenso.
En la jornada 33 llegó el Betis B en partido televisado. Era otro de los aspirantes a la promoción y Bello se encargó de marcar el gol que supuso el triunfo. Una semana después se pudo haber refrendado todo, pero no se pasó del empate en casa ante La Unión con gol de Alberto Merino.
Faltaban cuatro jornadas y estaba casi todo conseguido, aunque quedaba por sellar la segunda posición, que daba algunos derechos en la promoción. En casa se dio la talla ante Lucena y Roquetas con sendos triunfos por 2-0 (goles de Sarmiento en propia meta y Ocaña ante los lucentinos y de Romerito y Javilillo ante los roqueteros). Fuera se logró empatar en Cáceres (0-0) y se perdió en el infierno de Écija (1-0).
Y llegó el gran día. El lunes 15 de mayo se celebró el sorteo para la primera ronda de la fase de ascenso. Tocó el desconocido Amorebieta, al que se le arrancó un empate esperanzador en Urreche con gol de Copi al empezar. En la Línea, pese a que los vascos se adelantaron, dos tantos de Ocaña supusieron la clasificación.
Lo que falta por contar sigue fresco en la memoria de todos los aficionados. El Tenerife llegó altivo a La Línea, donde ganó sin hacer gran cosa y con un gol de Pagola en propia puerta. Allí, en el Heliodoro Rodríguez, se demostró que militar en Primera no otorga categoría. En un ambiente feo y maleducado, la Balona dio la cara y mereció ganar no por juego, sino por acciones concretas porque con el 2-2 y en el minuto 88 se produjo la jugada del clamoroso penalti sobre David Hernández que Aitor Gorostegui no quiso pitar.