Rafael Escobar, el primero en llegar de Lucena |
El trasvase de jugadores entre la Balona y el Lucena, sobre todo de los celestes a los blanquinegros, ha sido algo corriente en las dos últimas décadas.
Aparte de Rafael Escobar, que llegó en 1998 a La Línea tras entrenar al Lucena, ha habido jugadores como Agustín Caballero, que luego regresó a su club de origen tras dos años en la Balona; Juan Carlos Castilla, aún en activo a sus 37 años en la Primera Andaluza y que también regresó al equipo aracelitano; el delantero Isco; el canario Abraham, con cuatro años por medio; o los actuales Mario y Rubén Cuesta, que el año pasado estuvieron en el equipo cordobés.