Castillo, en su época en el San Fernando |
El defensa derecho del Sanluqueño Castillo, ausente el sábado, admite que empujó al jugador linense Ocaña cuando éste se retiraba tras ser expulsado.
Castillo estaba en la grada a la altura de la bocana del vestuario blanquinegro y hay testimonios de que no fue un simple empujón, sino que se trató de una agresión en toda regla.
El jugador está recibiendo innumerables críticas en las redes sociales por parte de aficionados de la Balona que contemplaron lo sucedido. Castillo comenzó negándolo todo pero luego admitió que empujó al jugador de la Balona.
Diego Castillo fue protagonista de uno de los momentos más lamentables de la Segunda B cuando jugaba en el Écija en la temporada 2001-02. Tras anotar un gol en el Mirador en la última jornada se disculpó ante la afición porque el equipo en el que estaba no se jugaba nada y el Algeciras, que remontó, peleaba con la Balona por no bajar. A la temporada siguiente, tanto él como el entrenador, Montes, terminaron militando en el conjunto albirrojo, lo cual destapó todo tipo de especulaciones.
Castillo estaba en la grada a la altura de la bocana del vestuario blanquinegro y hay testimonios de que no fue un simple empujón, sino que se trató de una agresión en toda regla.
El jugador está recibiendo innumerables críticas en las redes sociales por parte de aficionados de la Balona que contemplaron lo sucedido. Castillo comenzó negándolo todo pero luego admitió que empujó al jugador de la Balona.
Diego Castillo fue protagonista de uno de los momentos más lamentables de la Segunda B cuando jugaba en el Écija en la temporada 2001-02. Tras anotar un gol en el Mirador en la última jornada se disculpó ante la afición porque el equipo en el que estaba no se jugaba nada y el Algeciras, que remontó, peleaba con la Balona por no bajar. A la temporada siguiente, tanto él como el entrenador, Montes, terminaron militando en el conjunto albirrojo, lo cual destapó todo tipo de especulaciones.